
Esté jueves 23 de enero se estrena en las salas de cines de México la tan aclamada como polémica Emilia Perez, dirigida por Jacques Audiard, director francés ganador de la Palma de Oro. La cinta está protagonizada por Karla Sofía Gascón y Selena Gomez, y representa un innovador acercamiento al género musical con elementos del cine mexicano.
Emilia Pérez, que recibió una gran ovación de pie durante su estreno en el Festival de Cannes del año pasado, llegó a México con altas expectativas, sin embargo se ha enfrentado a una fuerte crítica por la representación tan alejada de la realidad que ha hecho de México. La premiere en la Ciudad de México, celebrada este 15 de enero, contó con la presencia de su protagonista Karla Sofía Gascón, Adriana Paz quien es la única actriz mexicana que participó en el proyecto y el aclamado director Jacques Audiard, reconocido por obras como Un profeta (2009), Dheepan (2015) y De óxido y hueso (2012).

Uno de los puntos más criticados de la película ha sido el español de Selena Gómez, quien a pesar de sus raíces latinas muestra un acento forzado y una pronunciación que evidencia su falta de dominio del idioma. La actriz y cantante, que interpreta a la esposa del “manitas” ha reconocido que fue un reto interpretar su papel en español, aunque defendió su esfuerzo por honrar sus raíces mexicanas a través de este proyecto. En un comentario hecho a través de Tiktok, la cantante se defendió frente a las críticas del también actor mexicano Eugenio Derbez quién en un podcast habló de la falta de preparación de la cantante:
“Entiendo de dónde vienes… Lamento haber hecho lo mejor que pude con el tiempo que me dieron. No quita cuánto trabajo y corazón puse en esta película”, comentó la cantante.
Emilia Pérez se ha convertido en una de las películas más polémicas de 2025, y su estreno en México ha traído diversas críticas por su forma de retratar el racismo, el narcotráfico y los estereotipos mexicanos. Los debates se han centrado particularmente en el uso de clichés sobre la cultura mexicana y la superficialidad con la que se abordan temas sensibles como la violencia del narcotráfico y la discriminación racial. Si bien la película pretende ser una sátira musical, varios críticos y espectadores han señalado que el tratamiento de estos temas resulta más ofensivo que crítico, evidenciando una mirada extranjera que simplifica la compleja realidad social del país